«Decidí que yo no me podría morir sin tocar un instrumento»… Lo cierto es que NUNCA es tarde para ser feliz, para darte la oportunidad. Óscar empezó a desde cero a los 45 años y hoy, como el lo dice, «no se imagina un sólo día sin tocar».
Al final, lo más hermoso de su historia es que la música es algo que le trae gozo, un gozo que no conocía y que nos llena el alma, ¡para eso es la música! Además de la conexión musical que ahora tiene con su hijo y sus amigos. Ser parte del desarrollo musical de Óscar es un honor para nosotros y es un orgullo que sea parte de la comunidad mundial de bajistas del Instituto de Bajo, ¡Que disfrutes su historia!
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Buenas noches. Mi historia es bastante parecida a la anterior. Parti desde cero, no tenía ni idea de nada. Empecé a los 53. Tomé clases durante cuatro años con un profesor, me lo tomé en serio y hoy cojo los temas los armoniza y toco sobre ellos. Toco en una agrupacion folklórica y eso si, no dejo tocar ni un día. Soy maestro retirado y tengo todo el tiempo del mundo. Es un placer tocar este instrumento Maravilloso. Un abrazo