Continuamos con nuestra serie de artículos en los que conocemos algunos de los programas más reconocidos del mercado para grabación y producción musical, para esta ocasión conocemos el gran Cubase.
Creado por la compañía alemana Steinberg, Cubase, es un software de desarrollo de audio digital, MIDI y secuenciador de música (mejor conocido como DAW – Digital Audio Workstation). El origen de este programa se remonta a hacia finales de los años 80, cuando era principalmente un secuenciador y un editor MIDI. Este programa actualmente ha sido diseñado para que se pueda trabajar desde el sistema operativo de Apple, o bien, a través de Microsoft Windows.
La última versión de Cubase salió al mercado el 12 de Marzo del presente año. Realmente se trata de una plataforma de edición de sonido bastante estable y avanzada, cuyas características van un poco más allá que las ofrecidas por otros software como lo es el Garage Band, por citar un caso. Igual que todo programa orientado al desarrollo de música, es natural encontrar, características como indicadores de onda, medidores de sonoridad y velocidad de las pistas, además de un ambiente de control de grabación tanto de los instrumentos como de la misma voz del cantante. Este software trabaja con formatos profesionales de sonido que van desde el MIDI y Wav, pasando por Aiff, MP3 y OGG, hasta el WMA y W64, entre otros. Otro elemento interesante es que a través de este programa se pueden realizar producciones surround, es decir, piezas con sonido envolvente, que es la técnica enriquece una pista para que el oído pueda percibirla desde distintos ángulos.

Dentro de las herramientas a destacar se encuentra la edición de sonidos y efectos, la notación y edición de partituras y la incorporación de instrumentos externos. Precisamente esta ultima característica, logra que este programa se destaque frente otros, en tanto permite trabajar directamente con los instrumentos físicos. En otros softwares, los desarrolladores han creado un ambiente para el uso de instrumentos, que bien pueden ser instrumentos de cuerda como una guitarra o de percusión como una batería e incluso llegando a los de viento; sin embargo esto se queda en un simple escenario interactivo y experimental, demasiado elemental y cuyo uso llamaría muchísimo la atención de un niño, mientras que a través del Cubase es posible conectar a través de puertos específicos desde un sintetizador hasta una guitarra electroacústica o cualquier otro tipo de instrumento eléctrico. De este modo que éste se transforma en un equipo (hardware) que entra en sintonía con las capacidades del programa, permitiendo grabar piezas de sonido directamente desde las notas que ejecuta el artefacto musical.
Por otra parte, el editor de partituras se convierte en un característica de gran utilidad para el músico, en tanto a través de éste se pueden incluir comentarios, arreglos o acompañar la letra de la canción además del empleo de los cientos de símbolos que representan la notación musical. Para un director de orquesta o un profesor de música, esta sería una herramienta ideal ya que tras realizada la edición, es posible imprimir el documento. Una vez configuradas las notas, el programa reproduce con total maestría y perfección los sonidos integrados en la partitura. Otro factor clave a destacar, es que tal como lo afirma la compañía Steinberg, no es necesario que seas un genio para el uso de las progresiones de los acordes. Esta empresa desarrollo un sistema que nombró como el Chord Assitant, el cual ayuda a generar las progresiones de los acordes de manera correcta, teniendo en cuenta el estilo de música, ya sea Rock, Pop o Jazz; Cubase se hace cargo siguiendo un algoritmo de reglas armónicas de seleccionar e integrar los acordes de acompañamiento con el fin de permitir la elaboración de piezas musicales perfectas.

Finalmente, uno de los aportes más interesantes en los que trabajaron los desarrolladores y los profesionales de sonido fue la creación de lo que se podría denominar una sala de estudio, bautizada como el VST Connect SE 3. Este salón permite que distintos intérpretes se conecten a través de Internet para trabajar en conjunto en la producción musical. Esto quiere decir que si el artista se encuentra en otro estudio de grabación o bien, en otro país, el VST Connect ser hará cargo de que los integrantes de la producción trabajen simultáneamente. El aporte que hace el guitarrista desde un lugar remoto pasa directo al escenario de edición. Este es un hecho revolucionario, porque en este punto ya estamos hablando del hecho de que este software se convierte en un autentico estudio profesional.

El valor del Cubase Pro 8 ronda los $600, mientras que el Cubase Artist 8 es ronda los $300. Si posees una versión anterior al Cubase 8 la compañía Steinberg se hará cargo de actualizar el software de manera gratuita. La diferencia entre ambos radica en que el Cubase Artist está orientado para un músico explote sus conocimientos y su creatividad con las distintas facetas que le ofrece el programa. Mientras tanto el Cubase Pro tiene un enfoque mucho más serio, más profesional y diseñado para auténticos ingenieros de la producción de sonido.

cuanto es el valor en moneda Colombiana, estoy interesado gracias